Después de muchos días sin novedades, vuelvo para mostraros
estos estupendos fofuchos, se trata de un encargo doblemente especial, por un
lado ha consistido en rememorar la vestimenta de la boda de Paco y Eder 50 años
después, y por otro, porque será probablemente la última pareja de fofuchos que
realice.
Han sido dos años estupendos, haciendo algo que me ha
apasionado, que ha sacado tanto lo mejor como lo peor de mi cuando algo no
salía como yo quería, han sido muchas, muchísimas horas dedicadas a estos estupendos
muñequitos que descubrí un día por casualidad navegando por la red. Sin
embargo, todo tiene un principio y un final, este año he decidido comenzar algo
que también me ha apasionado desde pequeña, la fotografía, y ya no dispongo del
tiempo necesario para llevar a cabo estas fofuchas. Por ello he decidido
plantarme aquí, dar por finalizada una bonita etapa para comenzar otra, que
espero que sea más bonita si cabe. Desde aquí quiero agradeceros a todos y cada
uno de los seguidores tanto del blog como de Facebook o instagram, cada segundo
que habéis invertido en ver mis trabajos. ¡Gracias de todo corazón!
Por el momento, esto solo afecta a las Fofuchas, las pulseras
seguirán en activo, aunque probablemente las novedades serán con menor
frecuencia, por ello la página de Facebook pasará a llamarse Pulseras
Olguichuela, en lugar de Fofuchas y broches Olguichuela.
Por último quería volveros a agradecer todo el tiempo que
habéis invertido en ver mis trabajos, todas las buenas palabras que me habéis
dedicado y todos los me gustas que me habéis regalado. Solo puedo decir,
¡¡GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS!!